| EL NUEVO DIA - El País Clamor por un Santurce para todos El incómodo silencio que desde hace meses arropa el barrio San Mateo -donde cerca de 400 residentes han sido desalojados para dar paso al Proyecto de Revitalización de Santurce- fue interrumpido momentáneamente ayer cuando amigos y vecinos del sector marcharon hasta la oficina de la Junta de Planificación (JP) cargando un enorme bizcocho, que simbolizaba su comunidad. Queremos un Santurce para todos, con un pedazo de ese bizcocho para cada uno de los pobladores de este barrio, afirmó Mary Anne Hopgood, propietaria del Museo del Barrio, antes de iniciar el recorrido. La también portavoz del grupo Santurce No Se Vende sostuvo que con el plan de revitalización se está desplazando a los residentes viejos y pobres del sector que no tienen otro lugar a donde ir y que a la misma vez aniquila la riqueza cultural del sector. ¿Cómo se va a atender a los residentes? ¿Dónde encajamos en este proyecto?, cuestionó Hopgood. Por su parte, el presidente interino de la Junta de Acción Comunitaria San Mateo de los Cangrejos, Nelson Garayúa, explicó que todavía residen en el sector unas 40 personas de las cuales 17 son ancianos que no tienen lugar a donde ir. El dinero que les dieron por su propiedad ahora no les alcanza para conseguir una propiedad similar en el nuevo Santurce², aseveró Garayúa. Indicó, además, que desde que comenzó el proceso de expropiación de residencias la Policía dejó de prestar vigilancia en la zona. Como consecuencia, los vándalos han comenzado a saquear los edificios vacíos y una comunidad de deambulantes se ha mudado al sector. Asimismo, alertó que edificios de valor histórico se encuentran en peligro de desaparecer como es el caso del Hospital Mimiya y el edificio que albergó la Tienda Belages, una construcción del arquitecto Henry Klumb. Esperamos que esta nueva administración detenga la masacre de Santurce y sea más sensible a esta situación, señaló el también abogado, quien extendió al nuevo gobierno una invitación al diálogo. Nos gustaría conversar con ellos para ver si se pueden incorporar cambios al plan que permitan el desarrollo de vivienda para personas de ingresos mixtos, agregó. Como cierre de su manifestación, el grupo de santurcinos partió del Museo del Barrio en la calle Candelaria hacia el Edificio Roberto Sánchez Vilella, antiguo Edificio Gubernamental Minillas, donde ubican las oficinas centrales de la Junta de Planificación. Ataviados con delantales y sombreros de chef blancos, bizcocho en mano, los manifestantes gritaban las consignas Santurce no se vende, No vamos a dejar que nos vendan el Barrio. En la Junta de Planificación fueron atendidos por su vice- presidenta, Wanda Capó, quien recibió el bizcocho y una lista de 85 preguntas que la comunidad tiene en torno a los alcances del proyecto. Capó se comprometió a contestar todas las preguntas y a coordinar una reunión entre su agencia y la comunidad para conversar sobre el proyecto. Sin embargo, aclaró que su agencia no tiene injerencia en el proyecto. Dijo que la participación de la Junta se limitó a enmendar el reglamento que dio paso al proyecto.
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